Zoé es hija de una detective de la policía y no habla desde que su padre fue asesinado por un mafioso. Nico es un ladrón que pasa las noches entre casas y museos, afanando joyas. Dino es un gato que pasa los días animando a Zoé y las noches ayudando a Nico a robar y que, sin quererlo, hará que la niña y el ladrón se encuentren.
Un Gato en París es una curiosa cinta de animación francesa. Llaman la atención dos cosas de la misma: la primera en un estilo extraño, casi de cuento infantil. Lo segundo es una trama que a priori no tiene demasiado para niños. En conjunto crean una sensación extraña pero agradable: la de estar viendo una película para niños que no es para niños.
Puedo decir que, salvo un par de momentos, disfruté mucho de la película. Tiene una trama interesante, personajes relativamente complejos para una cinta infantil, buena animación, algo de comedia, algo de drama, accion... Lo malo es que no deja de ser una cinta infantil y simplifica demasiado algunos temas. Aún así, una buena película para los amantes de la animación.
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