Hace poco vi en el cine la película de ciencia ficción Gamer, una cinta que presenta un futuro distópico en el que una sociedad indolente encuentra su única motivación en versiones de las redes sociales y los juegos online en las que se manipula a gente de verdad, que en muchos casos se juegan la vida. No se puede evitar que su premisa recuerde mucho a la de la película Perseguido, protagonizada por Arnold Schwarzenegger.
Perseguido es una cinta de acción basada muy libremente en la novela The Running Man (El Fugitivo en España) escrita por Richard Bachman (seudónimo de Stephen King). Mientras en la novela el protagonista es un hombre que participa voluntariamente en un macabro concurso de televisión para ganar dinero y así salvar a su hija enferma, en la película es un ex-policía acusado injustamente y obligado a participar en el concurso. En Perseguido se habla del control y la manipulación a través de la televisión y en Gamer se utilizan las redes sociales. Las similitudes son evidentes.
Aprovechando la añoralgia, volví a ver la película después de años y noté un par de cosas curiosas. Lo primero, que fue extrañamente acertada en algunos detalles sobre el futuro (en una escena se ve claramente una pantalla plana tamaño gigante en una casa, o a gente comprando billetes de avión a través de un ordenador). Lo otro que noté es que los perseguidores (lo malos) son un japonés, un tío con pinta de alemán, un obeso cantante de ópera y un tío de color. El único perseguidor que no lucha contra el Chuache es un tío con flequillo llamado Capitán Libertad, que viste con los colores de la bandera estadounidense y habla sobre honor. Una muestra más del amor por otras culturas que sienten en los EE.UU. En fin.
Olvidando eso y alguna machada, Perseguido es una película de acción ochentera que hace pasar un buen ratejo a todos los amantes del cine de acción. Es más, considero que es mucho mejor película de acción que las que se hacen hoy en día. ¿Será verdad, o es que me vuelvo viejo?
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