lunes, 29 de diciembre de 2008

La "magia" del cine: El culebrón Watchmen


Watchmen (de la que ya hemos hablado un par de veces) es una película producida por la Warner Bros basada en el cómic homónimo de Alan Moore y David Gibbons. La película tenía previsto estrenarse en Marzo de 2009, hasta que... bueno, mejor empezamos por el principio.

Febrero de 2008. Watchmen está a punto de terminar su rodaje y comenzar la fase de post-producción, a la par que Warner se está gastando la gran pasta en promoción y merchandising (videojuegos, muñecos, posters, etc.) cuando 20th Century Fox da la gran sorpresa: demandan a Warner Bros alegando que ellos poseen los derechos para cine de Watchmen. Y parece que es verdad.

Fox intentó poner el proyecto en marcha un par de veces sin que llegara a cuajar y transfirió los derechos de realización a otra compañía, pero se reservó los derechos de distribución. Así que piden que se cancele el estreno hasta que se solucione el tema. En otras palabras, que la película se las suda, pero quieren sacar tajada.

El caso es que se rumorea que el problema parece radicar en Batman. Y no el Batman molón de Christopher Nolan, sino el Batman yeyé de los 60. Parece ser que la serie la rodó y emitió la Fox, pero como los derechos sobre los personajes los tiene Warner (Batman es un personaje de DC, que es propiedad de Time-Warner) no dan permiso a la Fox para editar el DVD con episodios de la serie (esperando a que estos caduquen para aprovecharlos ellos)y Fox ahora les devuelve la pelota. El poder de la añoralgia.

El pasado 26 de Diciembre, salió la primera resolución judicial: los derechos de distribución pertenecen efectivamente a Fox, y "sugiere" a la dos compañías que lleguen a un acuerdo en lugar de alargar el proceso, que podría durar un par de añitos. Así que o bien Warner paga una pasta (y si lo de Batman es cierto, cede los derechos de distribución del DVD), o cede la película a Fox, la cual casi seguro que la mirará con lupa y exigirá una reedición de la misma.

Y en eso queda la cosa. Probablemente Warner recurra, y luego las dos compañías llegarán a un acuerdo, pero hasta que éste se firme, el estreno de Watchmen se pospondrá. Evidentemente, para las dos compañías interesa llegar a un acuerdo lo antes posible, pero al final será todo cuestión de números y, aunque difícil, que al final la película "desaparezca" tampoco sería demasiado de extrañar.

Estoy seguro además de que el caso Watchmen no es un caso aislado, y que puñaladas como éstas vuelan día sí y día también entre compañías. Y esa es la "magia" y el "glamour" del mundo del cine, que siempre ha sido, y es cada vez más, poco más que un negocio.

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